Y mientras la arena se sofocaba, el péndulo se agitaba vigorosamente...


El otro día decidí abrir un viejo ropero que mantenía cerrado desde hace años con una llave que rutinariamente me colgaba en el cuello por temor a perderla entre mi desquiciado (pero aburrido) estilo de vida. Ésta vez el ropero se veía un poco diferente a como lo recordaba la última vez que lo abrí, desde luego que eso había sido cinco años atrás. Nota mental: Siempre que abras algo que por años ha estado totalmente descuidado, usa casco a menos que quieras sufrir una contusión.


Me lavanté algunos segundos después tan sólo para darme cuenta que fui golpeado por un grueso libro de matemáticas (de haberlo leído, quizá me hubiera causado el mismo efecto), pero fue un afortunado incidente que me llevó a encontrar el destartalado reloj Cuckoo que me obsequiaron una vez en navidad... Me entusiasmé como por 20 segundos hasta que recordé porqué estaba en ese ropero: el pequeño latoso no me dejó dormir una noche completa desde que me lo regalaron hasta que lo confiné al fondo de ese ropero. Pero ese no es el asunto al que dedico al entrada, sino lo que sucedió después.


A pesar de que el reloj estaba atrapado bajo cientos de afiches inútiles arrumbados en un ropero cerrado con llave, podía escuchar el segundero repiquetear afanosamente de un modo enloquecedor, segundo tras otro y tras sesenta enloquecedores segundos un crujido aún más fuerte marcó el avance de un minuto. Fue aquel el minuto más prolongado que había vivido en mese, de no ser porque estaba consciente del sonido del segundero, jamás me habría percatado que fue tan sólo un segundo y creo que eso se debió a que estaba consciente. El tiempo se dilató.


Es interesante indagar en la naturaleza del tiempo, nada es tan conocido y extraño a la vez. Es algo que sin duda vivimos a diario, considerado como la cuarta dimensión: Una serie de objetos en tercera dimensión. Pero que inusual puede llegar a ser. El tiempo puede transcurrir según la percepción de un observador, lo mismo llega a suceder con el espacio-tiempo, una correlación que se reafirma con la teoría de la relatividad, en la que se sugiere que la percepción del tiempo y el espacio varía según el movimiento del observador (Para más información: Spacetime, Espacio-Tiempo). Éste hecho, si bien un poco controversial resulta abrumadoramente cierto en la práctica. Y es que, cuando se está al pendiente del tiempo extrañamenmte para el observador el tiempo puede parecer más largo de lo que realmente es. Sucede lo contrario cuando no se le hace caso al tiempo, somo puede ser durante una reunión entre amigos, evento en el que incluso tres horas pueden haber sido percibidas por el observador como menos de una hora, incluso minutos.


Según Einstein, la percepción del tiempo depende también de nuestra percepción del espacio, ya que los eventos cotidianos ocurren en el espacio-tiempo. Desde un punto de vista psicológico el tiempo también puede depender de la edad, describiendo que el tiempo puede parecer más lento conforme avanza la edad. La anticipación también suele ser causa de una dilatación, al menos en la perceción del observador. Así pues, el tiempo juega un papel fundamental en nuestras vidas, y sin embargo es prácticamente imposible para nosotros describirlo en nuestras propias palabras. Hay filósofos que definen al tiempo como algo irreal, como una mera cuantificación, como una invención humana (Ej. Parménides). Y quizá no estén tan alejados de la realidad, quizá no en el sentido factual, en el que sería irresponsable dar una conclusión de si el tiempo existe o no en el entorno físico (personalmente me inclino a su existencia), sino en el sentido metafórico. Aquel en el que simplemente los conceptos de futuro o pasado son solamente parte de la memoria o producto de la especulación, desde el punto de vista de que lo único existente es el presente, el efímero suspirar de un universo cambiante y todo lo demás se extingue.

¿Qué opinan mis queridos lectores el tiempo es real o solamente una magnitud? ¿El tiempo realmente se dilata? ¿De qué eventos puede depender ésta dilatación?


Posdata. Como protocolo me exigen dar un dato útil para que éste blog aparezca de vez en cuando en una de sus búsquedas en Google. Un segundo en el Sistema Internacional equivale a 9,192,631,770 periodos de radiación durante la transición entre dos estados hiperfinos del estado fundamental del Cesio 133 (Cs 133)
Se despide después de un par de cervezas de raíz (Me timaron... me hicieron creer que tenían alcohol) Yey.

No hay comentarios:

Publicar un comentario

 
Mariposas de papel - Yey Osax